Cerro Rico: Operaciones mineras sobre la cota 4.400 son castigadas con procesos penales
Potosí, 03 de septiembre de 2025 (COMIBOL)
Cualquier actividad minera sobre la cota 4.400 del Cerro Rico -zona declarada prohibida- será castigada con procesos penales y los infractores tendrán que asumir las consecuencias. La advertencia fue emitida por el gerente regional de la Corporación Minera de Bolivia (COMIBOL) en Potosí, Ing. Iván Fuertes.
“Estamos trabajando en el tema técnico haciendo las mensuras (en interior como exterior mina) tapiando (cerrando) los parajes de malos trabajos. Las mensuras son para identificar a los autores que están ocasionado los hundimientos y, una vez identificados serán procesados de acuerdo a la ley”, afirmó la autoridad gerencial.
La mensura de una mina implica medir, ubicar y documentar, mediante planos, los límites de un terreno minero, ya sea en superficie o subterráneamente, en función de un contrato jurídico que origina la propiedad (título de propiedad o concesión).
A partir de las sentencias constitucionales números: 005/2022 y 1062/2022, concurrente con la Resolución Ministerial (R.M.) N°105/2022, el Poder Judicial declaró prohibida cualquier actividad minera sobre la cota 4.400 y, delegó a la COMIBOL y el Ministerio de Minería, hacer cumplir la disposición judicial.
Para este efecto la estatal minera desde hace cuatro años viene cerrando minas sobre la cota 4.400 y, reubicando a los operadores mineros en otros yacimientos.
El proceso es gradual, pero irreversible y, hasta ahora, aproximadamente el 80% de las bocaminas de un número de 56 que operaban en la cima del macizo rocoso fueron inhabilitadas.
En paralelo, desde hace más de 90 días la COMIBOL en Potosí puso en marcha un plan estructural destinada a inmovilizar actividades mineras sobre la cota 4.400, declarada zona prohibida y, por lo tanto, exenta de trabajos de extracción de óxidos de plata.
Las medidas que están en marcha contemplan: fijar un radio de seguridad y establecer una zona prohibida para extraer óxidos de plata en interior mina en un radio de 200 metros que se extiende desde la cota 4.400 a la cúspide; restringir actividades mineras los fines de semana y, en horarios nocturnos, en el Cerro Rico.
Establecer áreas de control altamente rigurosas para el tráfico y comercialización de mineral proveniente del macizo rocoso, fijar trancas de control que serán adicionales a los cinco puntos de control y de fiscalización que tiene emplazados, actualmente la COMIBOL en áreas estratégicas del macizo rocoso.
Las decisiones fueron asumidas en consenso con las cooperativas mineras y la Federación de Cooperativas Mineras (FEDECOMIN), entidad privada que aglutina al conjunto de los operadores mineros en el departamento de Potosí.
Desde la gestión 2022, la Gerencia viene ejecutando el plan de emergencia denominado relleno seco para el sostenimiento estructural del macizo rocoso. En los últimos dos años las incidencias geológicas aumentaron significativamente debido a la explotación no planificada de óxidos de plata.
Debido a esta situación los hundimientos volvieron a reactivarse y, algunos, llegaron aumentar en diámetro y profundidad lo que generó preocupación.
“Estamos en una emergencia crítica”, subrayó Fuertes para quién es urgente aplicar, con rigurosidad, las medidas que están en marcha para evitar una mayor degradación geológica de la montaña de plata.
“Es deber de todos, no solo de la COMIBOL, sino de la Alcaldía, la Gobernación, Universidad y, por supuesto, de las cooperativas, la preservación del Cerro Rico. Los operadores mineros asumieron conciencia y, están declarados aliados de este proceso, no cabe duda”, aseguró Fuertes.
Sostenimiento geológico permanente
Los últimos cuatro años la Corporación Minera de Bolivia, a través de la Gerencia Regional en Potosí, viene desplegando un plan permanente de sostenimiento geológico del Cerro Rico y, acelera de forma progresiva y consensuada con las cooperativas, la migración de actividades mineras que se encuentran por encima de la cota 4.400 del macizo rocoso.
Con respaldo del Ministerio de Minería y de Culturas, la Corporación que tiene la responsabilidad de administrar el Cerro Rico, también logró apoyo de la Gobernación de Potosí, la Federación de Cooperativas Mineras de Potosí, y, por supuesto, de la Universidad Autónoma Tomás Frías, y el Comité Cívico Potosinista, para alcanzar dos objetivos estratégicos: la conservación geológica del macizo rocoso y, el desalojo de actividades extractivas que existen sobre la cota 4.400, considerado el área más vulnerable del Cerro Rico de Potosí.
Hasta el momento el traslado de relleno seco, en lo que va del primer semestre, demando recursos por el orden de los 800 mil bolivianos y, en función del plan de emergencia que está en marcha, la COMIBOL junto a los operadores mineros (cooperativistas), estiman que los fondos destinados a mitigar los hundimientos subirán a un promedio de 210 mil bolivianos semanales por el traslado de más de doscientos mil metros cúbicos de relleno seco, diariamente.
“El proyecto que está en marcha prevé movilizar, en promedio, 100 volquetas por día”, precisó Fuertes que anunció la ejecución del plan solo hasta el mes de noviembre, debido a que, a fin de año, comienza la época de lluvias, lo que dificulta continuar con las operaciones de mitigación geológica.
Migración y sentencia constitucional
Entre el 2022 y 2025 la gerencia en Potosí, viene promoviendo, de manera ininterrumpida, audiencias de información con los operadores mineros para que conozcan los alcances legales y técnicos que tienen dos asuntos centrales: la vigencia de una sentencia constitucional y, los beneficios que tiene la migración de las cooperativas mineras que realizan los trabajos sobre la cota 4400 m.s.n.m.
Las reuniones dedican, tiempo y espacio, a precisar información técnica, por ejemplo, para ubicar las bocaminas y/o áreas expectables sujetas a migración y las condiciones en las cuales serán reubicadas en el marco del contenido y la disposición de las sentencias constitucionales número: 005/2022 y 1062/2022, concurrente con la Resolución Ministerial (R.M.) N°105/2022.